Las primeras revisiones de vuestro bebé en la consulta son las que más tiempo nos llevan porque la lista de preguntas es interminable.
Hay madres que vienen con la “Lista de la compra” en el móvil, otras en una servilleta improvisada, las hay que directamente sacan el folio impreso con todas las cuestiones adecuadamente enumeradas y las hay que sacan la libreta, empiezan por la página 1 y para mi sorpresa, terminan unas cuantas páginas más adelante.
¿Y esto? ¿Es normal? Empezamos…
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A veces me asusto porque por las noches hace muchos ruiditos ¿Eso es normal?
Sí, es normal. Da la sensación que lo que hemos parido no es un bebé sino un perrito o a veces un cerdito. He de reconocer que cuando yo pasé por ello me preguntaba exactamente lo mismo. Sí, los bebés hacen ruiditos a todas horas; los oímos sobre todo por las noches ya que hasta ese momento, el silencio reinaba en nuestra habitación. A veces se les reseca la nariz, o incluso empiezan a hacer los ruiditos ellos espontáneamente porque se los descubren, se escuchan y les resulta curioso, por lo que los hacen una y otra vez.
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¿Y estos granos que le han salido? ¿Es normal?
También es normal. Se llama exantema del recién nacido. Son unos pequeños granitos blanquecinos rodeados de un halo rojo que parecen picaduras. Son normales y aparecen entre el 3º y el 7º día de vida.
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Tiene las uñas tan frágiles que se le rompen ¿Es normal? ¿Cuándo puedo cortárselas?
Es normal. Las uñas son muy frágiles durante sus primeros meses. Puedes esperar unos días antes de cortárselas porque a veces nacen con ellas muy pegadas a la piel del dedo. Son muy útiles las limas, yo en su día las usé mucho con mis hijos. Son unas limas especiales para bebés (limas de cristal). Cuando compres unas tijeras, intenta que sean de punta roma. Evitarás accidentes, sobre todo si tiene hermanitos mayores que puedan llegar a imitar en un momento dado a mamá y cojan las tijeras sin que nos demos cuenta. También os digo que si vuestro bebé nace con unas uñas a lo “Eduardo manos tijeras” y sois habilidosas, no hay ningún inconveniente en cortárselas al nacer.
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Estornuda ¿Es normal?
Esta pregunta me encanta. El bebé tiene 4 horas de vida, está plácidamente acopladito en el pecho de su mamá y al entrar en la habitación de pronto algún familiar te dice: “¡Ay, está estornudando! ¿No se habrá resfriado al nacer?”. Sonrío, sonrío siempre… No, no se ha resfriado. Son reflejos del recién nacido.
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¿Puedo bañarlo todos los días o es malo?
Puedes aunque no es necesario; ahora, si compruebas que le relaja y le gusta, adelante. No hace falta que le enjabones y le frotes como para sacarle brillo cada vez. Con un jabón neutro, un Syndet (Jabón sin jabón) o un aceite de baño es suficiente. Aunque el cordón no se le haya caído también se puede bañar, sí. Solo has de secarlo bien al salir. Y si observas que la piel de su cuerpo se va descamando con el paso de los días, es normal. Utiliza una crema hidratante especial para bebés y en unos días estará como nuevo.
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Cada vez que come hace caca ¿Es normal? Pues el mío hace una vez cada 5 días, pero entre tanto y tanto está tan feliz ¿Es eso normal?
Ambas cosas son normales. Ni lo primero es una diarrea ni lo segundo es un estreñimiento. Cada niño tiene su ritmo que debemos respetar siempre y cuando el niño coma con normalidad, gane peso y no se queje.
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Tras mamar o tomarse el bibe, no tira el eructo ¿Es normal? ¿Tengo que hacer algo?
Echar el eructo no es obligatorio. Hay niños que no lo necesitan, hay otros que lo tiran antes de terminar de comer y en varias ocasiones (estos son los que yo llamo “ansias”) y los hay, como mi hijo mayor, que inmediatamente después de mamar nunca lo tiraba por mucho que yo insistiera pero en cuanto lo dejaba en la hamaquita o en el capazo empezaba a protestar y con tan solo incorporarlo un poquito, rugía como un león. Así que en cuanto lo descubrí no perdía el tiempo dándole golpecitos como me decía mi madre; lo tumbaba y era automático. Con mi segunda hija no me funcionó. ¡Ja! Esto es lo mejor de la maternidad, lo que te funciona con uno, con el otro no te sirve para nada y cuando te creías una experta de pronto descubres que eres una novata.
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Parece como si estuviese estreñido: empuja, empuja y empuja, se pone como un tomate pero luego hace una caca blandita y líquida ¿Eso es normal?
Sí, también es normal. Se llama “Disquecia del lactante”. Para que el bebé haga caca tiene que empujar pero al mismo tiempo ha de relajar el esfínter y esto que a ti te parece tan sencillo, para un bebé recién nacido que está con sus primeras cacas, no lo es tanto. Él empuja con todas sus fuerzas (esto lo hacen muy bien) pero además aprieta el culito (aquí ya la hemos liado). Han de aprender. Tranquilos. Levántale las piernas cuando esté empujando, flexiona las rodillas (las del bebé, jeje) y verás como en esta postura hará más fácilmente.
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¿Tengo que marcarle un horario con las tomas para que se vaya acostumbrando?
¿Acostumbrando a qué? – me pregunto yo. No, la respuesta es no. La lactancia ya sea biberón o materna es a demanda. Cuando y cuanto quiera. Dale la vuelta a los relojes de tu casa.
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Acabo de salir del hospital ¿Puedo salir a la calle?
Pregunta estrella donde las haya. De hecho a esta pregunta le dediqué un post entero que os dejo aquí mismo.
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Se chupa los puños ¿Es normal?
Es normal, sí. No quiere decir necesariamente que tenga hambre. Se llama reflejo de succión y es un instinto de supervivencia de los mamíferos: en cuanto se les acerca algo templado a la boca, succionan por si eso les ayuda a alimentarse. Así que la próxima vecina que te diga :
- “Uy, uy, uy mira como se chupa los puños, eso es que pasa hambre”- no entres al trapo aunque lo estés deseando, de verdad, no lo hagas que son “comentarios trampa”. Nunca serás capaz de convencerla.
Tú Sonríe. Dale las gracias por el consejo y continúa felizmente con tu paseo.
El otro día estaba en la farmacia con mi hija. A mi niña se le ocurrió la mala idea de toser. Antes de que terminara la chiquilla de arrancar la flema, se abalanzó sobre nosotras una “amable” señora y nos dijo:
- Uy, uy, uy qué tos más fea. Te habrá llevado tu mamá al pediatra ¿no?– le dijo dándole palmaditas en la espalda ante mi mirada atónita.
Antes de que mi hija recuperase el aliento para contarle mi currículum vitae, me adelanté y le dije con la mejor de mis sonrisas:
- Sí, muchas gracias. De allí venimos.
Y con las mismas miré a la farmacéutica amiga y guiñándole un ojo le dije:
- Ibuprofeno en jarabe, por favor.
Muchas gracias y hasta la próxima, por cierto, ¿Pronto tendrás un bebe? ¿Ha llegado ya pero aún no ha cumplido el año? Pues esta conferencia online y de acceso inmediato es para ti. Bueno, más que una conferencia es esa charla que a mí me hubiese gustado tener con una amiga antes de ser madre o en pleno posparto cuando, ni lo vi venir, ni sabía lo que estaba por llegar.
Y es que a lo largo de esta hora, te contaré a pecho descubierto lo que a mí nadie me contó, el principio de todo, la forma en la que deberían abrirnos esa puerta hacia la tan anhelada y también idealizada maternidad y paternidad que imaginamos.